miércoles, 31 de octubre de 2007
Enric Sió I.
Nace el 5 de abril de 1942 en Badalona, aficionado al dibujo desde niño, realizó estudios de Economía y Bellas Artes y comienza a publicar desde muy joven.
Autor de inquietudes politicas e intelectuales, rara avis en una epoca de poco pensar y mucho producir, se vió obligado como tantos otros a trabajar para los mercados ingleses y franceses, entre otros, al tiempo que fue entregando una obra original y muy personal, influído por la efervescencia de los autores vanguardistas italianos y franceses, cuestionandose la importancia del autor en el entramado editorial.
Crítico con la profesión, pensaba que la pobreza cultural e intelectual de los autores españoles, pesaba como una losa a la hora de producir una historieta adulta y válida que no fuera continuadora de un comic industrial e infantiloide.
En 1967, la revista Oriflama le encargó la realización de Lavinia 2016 o la Guerra de los Poetas, cuyo guión firmara Emilio Teixidó y donde aparecen muchos de los protagonistas, cantantes, actores, escritores y políticos de Cataluña en clave satírica y crítica.
En esa misma época colabora con Román Gubern en el libro El lenguaje de los comics.
También en 1967, la Editorial Salvat le confa la realización de dos historias a color para sendas colecciones de fascículos, así nacieron Nus y el Atleta y Sorang, obras que le sirvieron para experimentar en el medio, páginas que son un auténtico hervidero de ideas gráficas y narrativas.
Entre 1969 y 1970 realizó Aghardi y la serie Mis Miedos, a color, dentro del género de horror fantástico, con destino a la revista Drácula. Paralelamente a Mis Miedos inició la que seria su obra maestra, Mara.
Esta obra ha sido considerada por numerosos especialistas como una de las más completas dentro de la historia del comic español. En ella se narra la vida de unos personajes en un entorno cerrado y con un desarrollo absolutamente ritual. Sió la definía como "una experiencia generacional-educativa de determinada clase social bajo el franquismo".
Lo cierto es que no es una obra fácil, bajo el maravilloso grafismo de sus viñetas bulle un guión pleno de referencias, pero sin concesiones al lector, el cual necesita completar, con sus propios conocimientos, lo que allí se le cuenta.
Estas últimas imagenes pertenecen a la historieta Eleonor, de la serie Mis miedos, publicada en Drácula, historia de terror, de corte clásico, pero muy lejos de las habituales con finales de justicia poética. Sió utilizaba en sus historias personajes, como aquí una niña, poco convencionales en este tipo de historias y que la hace especialmente espeluznante.
miércoles, 24 de octubre de 2007
Ray 25 de Carlos Gimenez.
Em 1971 Carlos Giménez dibuja la serie «Ray 25», sobre guión de Víctor Mora, para la revista Tintín de Editions du Lombard.
Una vez resuelta la problemática en torno a los derechos de «Dani Futuro», los autores se dedican a esta serie suspendiendo la producción de «Ray 25», sólo se publicó este episodio de 45 páginas. Publica este material en España Editorial Bruguera, en 1973, en su tebeo DDT y creo que no ha sido reeditado desde entonces.
Como es lógico al tratarse de esta editorial, no era precisamente un dechado de edición, ya sabeis: rotulación mecánica, colores chillones...,en fin, lo normal.
Logicamente es una obra poco conocida, y a pesar de la edición, el dibujo de Giménez es tan bueno como siempre, con algunos logros en el diseño de personajes, unos fondos «gaudianos» muy monos, pues parte de la acción sucede en Barcelona y sobre todo una impagable «corrida» de toros robóticos para turistas.
sábado, 20 de octubre de 2007
Arturo del Castillo no sólo dibujaba western.
Arturo Pérez del Castillo nació en Concepción el año 1925, hijo de inmigrantes andaluces.
Comienza adaptando películas al comic y es su versión de la novela "El hombre que ríe" de Víctor Hugo, la que le da cierto prestigio en Argentina y Europa.
En 1957, trabajando para la legendaria Editorial Frontera, se consagra con la serie "Randall, the killer", con guiones de otro grande de la historieta mundial, Héctor Germán Oesterheld, que se transforma en un clásico del género oeste. Publicado en la revista "Hora cero semanal", presenta a un solitario y duro caza pistoleros, en historias dramáticas y violentas, incluyendo incluso la muerte del héroe, lo que eleva las protestas del público y su necesaria resurrección. El personaje también triunfa en Europa, especialmente en Italia.
Paralelamente, ante la paulatina desaparición de las grandes revistas de historietas argentinas, trabaja para Europa, con la Fleetway inglesa, para los que realiza historietas de épocas diversas y adaptaciones literarias, donde acrecienta su fama con, entre otras, "Los Tres mosqueteros" y "El hombre de la máscara de Hierro", basadas en obras de Alejandro Dumas.
En la década de los 60, produce otros personajes, como "Garret", con guiones de Eugenio Zappietro, más conocido como Ray Collins, y "Dan Rover", ambas para la revista "Misterix".
También realiza, aproximadamente en 1961, "Sharon", la primera cow-woman de la historieta en Argentina. Para Europa, especialmente Italia y España, dibuja "Ralph Kendall" y "Ringo", que son publicados en revistas y álbumes.
En los años 70, trabaja para Editorial Record en la revista "Skorpio", creando "El Cobra", con guiones de Ray Collins, que es una nueva versión de "Garret", y, junto a Oesterheld, crea el "Loco Sexton", un periodista en el oeste, con historias que dan un nuevo enfoque al género. Realiza además multitud de historias cortas.
También dibuja para las revistas de Editorial Columba en Argentina, como Tony, D'artagnan o Fantasía, personajes del oeste o series históricas, generalmente de carácter unitario, sobre romanos, egipcios, vikingos, etc.
Para Columba, en su revista "El Tony", nuevamente con Ray Collins, crea "Bannister", un vaquero fugitivo que es acompañado de un muchacho de ciudad, en un verdadero viaje de iniciación.
En 1979 es premiado en la Bienal Internacional de Córdoba y, en 1980, recibe un Yellow Kid a su trayectoria en el Salón de Lucca XIV, máximo reconocimiento en el comic mundial. Además, es el único chileno que ha expuesto en el Louvre.
Con su hermano Jorge Pérez del Castillo, otro gran desconocido para nosotros pese a su éxito en Argentina, realizó en comic las biografías de Pancho Villa y Emiliano Zapata y un personaje apache llamado Takoma.
En Argentina, Oscar Masotta lo consideraba como uno de los cuatro mejores dibujantes del país, en cuanto a estética y capacidad de contar en imágenes, junto a Alberto Breccia, Hugo Pratt y José Luis Salinas.
Falleció en Argentina en 1992.
Puesto que sus páginas de tema western son de sobra conocidas, he preferido subir estas otras, de Los tres mosqueteros y algunas de la miniserie Horatius, publicadas en la británica Look & Learn, donde del Castillo demuestra su buen hacer con un estilo distinto al de sus obras más célebres, cercano a los grandes dibujantes de plumilla de principios del siglo XX, como Dana Gibson.
Comienza adaptando películas al comic y es su versión de la novela "El hombre que ríe" de Víctor Hugo, la que le da cierto prestigio en Argentina y Europa.
En 1957, trabajando para la legendaria Editorial Frontera, se consagra con la serie "Randall, the killer", con guiones de otro grande de la historieta mundial, Héctor Germán Oesterheld, que se transforma en un clásico del género oeste. Publicado en la revista "Hora cero semanal", presenta a un solitario y duro caza pistoleros, en historias dramáticas y violentas, incluyendo incluso la muerte del héroe, lo que eleva las protestas del público y su necesaria resurrección. El personaje también triunfa en Europa, especialmente en Italia.
Paralelamente, ante la paulatina desaparición de las grandes revistas de historietas argentinas, trabaja para Europa, con la Fleetway inglesa, para los que realiza historietas de épocas diversas y adaptaciones literarias, donde acrecienta su fama con, entre otras, "Los Tres mosqueteros" y "El hombre de la máscara de Hierro", basadas en obras de Alejandro Dumas.
En la década de los 60, produce otros personajes, como "Garret", con guiones de Eugenio Zappietro, más conocido como Ray Collins, y "Dan Rover", ambas para la revista "Misterix".
También realiza, aproximadamente en 1961, "Sharon", la primera cow-woman de la historieta en Argentina. Para Europa, especialmente Italia y España, dibuja "Ralph Kendall" y "Ringo", que son publicados en revistas y álbumes.
En los años 70, trabaja para Editorial Record en la revista "Skorpio", creando "El Cobra", con guiones de Ray Collins, que es una nueva versión de "Garret", y, junto a Oesterheld, crea el "Loco Sexton", un periodista en el oeste, con historias que dan un nuevo enfoque al género. Realiza además multitud de historias cortas.
También dibuja para las revistas de Editorial Columba en Argentina, como Tony, D'artagnan o Fantasía, personajes del oeste o series históricas, generalmente de carácter unitario, sobre romanos, egipcios, vikingos, etc.
Para Columba, en su revista "El Tony", nuevamente con Ray Collins, crea "Bannister", un vaquero fugitivo que es acompañado de un muchacho de ciudad, en un verdadero viaje de iniciación.
En 1979 es premiado en la Bienal Internacional de Córdoba y, en 1980, recibe un Yellow Kid a su trayectoria en el Salón de Lucca XIV, máximo reconocimiento en el comic mundial. Además, es el único chileno que ha expuesto en el Louvre.
Con su hermano Jorge Pérez del Castillo, otro gran desconocido para nosotros pese a su éxito en Argentina, realizó en comic las biografías de Pancho Villa y Emiliano Zapata y un personaje apache llamado Takoma.
En Argentina, Oscar Masotta lo consideraba como uno de los cuatro mejores dibujantes del país, en cuanto a estética y capacidad de contar en imágenes, junto a Alberto Breccia, Hugo Pratt y José Luis Salinas.
Falleció en Argentina en 1992.
Puesto que sus páginas de tema western son de sobra conocidas, he preferido subir estas otras, de Los tres mosqueteros y algunas de la miniserie Horatius, publicadas en la británica Look & Learn, donde del Castillo demuestra su buen hacer con un estilo distinto al de sus obras más célebres, cercano a los grandes dibujantes de plumilla de principios del siglo XX, como Dana Gibson.
miércoles, 17 de octubre de 2007
Los comienzos de Victor de la Fuente.
Ya, el título tiene truco, pero es que uno es así de tramposillo.
Dejo esa entrada en su acepción literal para otro momento, lo que hoy muestro son los prolegómenos, los "comienzos" de su trabajo. El calentamiento, los estiramientos en dibujo son los bocetos, apuntes rápidos y estudio de personajes.
Estos son todos ellos, anteriores a 1978 y si se saben mirar, cuentan bastantes cosas sobre el proceso de un virtuoso. Aún no se oye la música, pero ya se percibe que la melodía será genial.
miércoles, 10 de octubre de 2007
José Luis Salinas I
Todo lo que yo podría decir sobre este magnífico maestro de historietistas, auténtico pionero del tebeo de aventuras, está descrito -y mucho mejor, por supuesto- en este artículo de Carlos Trillo y Guillermo Saccomano, aparecido en la estupenda edición del año 1976 de Editorial Record de Hernán el Corsario.
Espero que los escaneos no os desanimen, creo que merece la pena el pequeño esfuerzo.
jueves, 4 de octubre de 2007
Los diamantes sangrientos de Victor.
En 1968 se publicó en Pilote, en el número 456, la historia en 6 páginas "Les diamants sanglants", la primera colaboración de Victor de la Fuente con esta mítica revista.
Las planchas tienen una distribución clásica, Victor aún no ha desarrollado todo su poder y creatividad compositiva, aunque se aprecia ya claramente su dominio narrativo y su poderoso dibujo.
El color dado, seguramente por la propia editorial, es regularcillo, pero no chirría demasiado.
martes, 2 de octubre de 2007
Arte y comic. Fernando Bellver.
Fernando Bellver gusta llamarse "artista contemporáneo vivo", y considera Madrid, donde nació en 1954, como su cuna artística. Bellver es un artista completo; grabadista, pintor, escultor y dibujante, ha trabajado también como docente universitario, y ha paseado su prolífica obra por numerosas galerías de todo el mundo.
Valga esta entradilla, copipegada de su biografía, como introducción somera a la figura de este credaor, a lo que habría que añadir que tiene un gusto exquisito y sutil para mezclar géneros y apropiarse, re-creandolos, de toda una serie de formas actuales, como la publicidad, el cine, la televisión y, por supuesto, el comic (sus personajes, más bien).
Traigo aquí una pequeña, pero irónica muestra de sus obras más cercanas al mundo del comic. Ved esas primeras imagenes, como tripticos medievales, pintados incluso con sus orlas circundándo el marco, sus títulos: La crucifixión de Batman y La Virgen del área chica. Entrad en su web, donde hay una extensa muestra de sus trabajos, pero sobre todo, no dejeis de visitar la galería donde expongan sus obras, si en vuestra ciudad se exhiben en algún momento, os aseguro que disfrutaréis con su trabajo y alucinaréis con su técnica y versatilidad.
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