El País. 16 de enero de 2010.
El Cubri. Del libro "El que parte y reparte se queda la mejor parte" 1975.
El Cubri nació oficialmente como firma en 1973, aunque antes de esa fecha Saturio Alonso (Soria, 1953) y Felipe Hernández Cava (Madrid, 1953), ya hacían sus pinitos, (que a Saturio le valió un premio en la revista Pilote). A ambos les entusiasmaban la lectura, la música, el cine… y los tebeos. Contactan con el grupo de teóricos agrupados alrededor de la revista ¡Bang! y pronto pasan de lectores a autores de tebeos. Jóvenes concienzados con la realidad social y política, se dan cuenta de que casi todo lo que se hacía en España en ese campo estaba al margen de la realidad del país. En ese sentido se puede afirmar que fueron los pioneros de la historieta política en España.
Deciden llamarse El Cubri en homenaje al cineasta Stanley Kubrick y sus primeros trabajos se publican en la revista ¡Bang! y Fotogramas.
El primer espaldarazo público lo constituye en 1973 el segundo premio a la mejor historieta infantil en el Festival de Cine para Niños de Gijón (El primer premio fue en ese año para los geniales Ventura y Nieto), por “Aventuras en el País de las Maravillas”, un alegato contra la guerra de Vietnam.
Aún falta un tercer miembro en este equipo: Pedro Arjona (Madrid, 1949) quien abandona un bien remunerado puesto como Director de Arte publicitario para correr esta aventura de El Cubri en la que el humor, la ilustración, el comic y el diseño iban a ser unas precarias fuentes de sustento, mientras el grueso de la actividad estaría dedicado al mundo de la clandestinidad.
Del libro "El que parte y reparte se queda la mejor parte"
En el año 1974, Saturio y Felipe tenían hechas gran parte de las historietas que se recopilaron en el libro “El que parte y reparte...” (1975) que fue su publicación fundacional, donde aparece como dibujante invitado Adolfo Usero.
Publican a partir de entonces en decenas de publicaciones y revista de todo tipo, humorísticas, políticas, de actualidad, culturales…
El mismo Felipe Hernández cuenta que dieron lo mejor de si mismos entre 1974 y 1978 en sus trabajos para las revistas Por Favor y La Calle.
Del libro "El que parte y reparte se queda la mejor parte"
En cuanto a ilustración, seguramente su mejor trabajo (Felipe dixit) fue el encargo de Editorial Sedmay para ilustrar en 1977 las portadas de los fascículos de "la Historia del Franquismo", escrita por Díaz Nosty y Daniel Sueiro y en la que empezaron censurándoles la primera de ellas.
De la historieta, se podría decir que hubo 4 corrientes fundamentales: una, marcada por la tendencia a crear una nueva gramática en este asunto de los tebeos, presente en muchos de los trabajos de “El que parte y reparte...” y pasa por “Mezquite” (western publicado en 1979 en La Calle, lo último que dibujó Saturio antes de abandonar el equipo), pasa también por “Luis Candelas” (revista Madriz, 1984) hasta llegar a trabajos más recientes, como el del libro colectivo "11 M. Once miradas" en 2005 y lo que de tarde en tarde realizan y guardan en el cajón a la espera de que la mentalidad editorial cambie un poco.
Página de "Mezquite".
Página de "Luis Candelas".
La segunda corriente la constituye el intento de introducir en la historieta española -con relatos de toreros, emigrantes, matrimonios- argumentos que aborden la realidad española con un lenguaje en apariencia más ortodoxo, la inconclusa “Paisa” (3 episodios publicados en la revista Rambla en 1982, sería tal vez el mejor ejemplo), necesidad de cubrir el vacío con un naturalismo social o crítico, que se había dado en literatura y cine, pero no en los tebeos, donde hubo que esperar a la muerte de Franco para que el gran Carlos Giménez lo fijase con sus series autobiográficas.
Página de "Sombras".
La tercera línea se inició a principios de los setenta con sus recreaciones de la serie negra, quizá la que mayor popularidad les ha dado: “Sombras” y las 2 historias del detective Peter Parovic (“Sueños de plomo” y “Cadáveres de permiso”) son sus mejores ejemplos.
La cuarta la constituyen todos aquellos trabajos que denominan didácticos, en los que la historieta les ha servido para hacer llegar a la gente los problemas de minusválidos, feministas, ecologistas o urbanísticos… donde la mejor muestra se alcanzó, ya en los ochenta, con una serie de tebeos que se distribuyeron en las escuelas sobre problemas del medio ambiente y donde el protagonista era un pato con ínfulas de detective: “El Pato Verde”.
A todo esto habría que añadir sus trabajos para cine y televisión, con cortos y documentales; el teatro, el diseño de carteles, portadas y cientos de publicaciones; colaboraciones con partidos y sindicatos de izquierdas, no sólo en la realización de carteles y material gráfico, sino creando asociaciones y actos de todo tipo; colaboraciones con movimientos vecinales de toda España en los barrios creando pancartas, murales y todo tipo de actos reivindicativos de los problemas de los mismos.
RESUMEN BIOGRÁFICO
1973. Historieta “Aventuras en el país de las maravillas”
1974-78. Diversas historietas e ilustraciones en las revistas La Calle y Por Favor. También colaboraciones en audiovisuales y cortometrajes de la productora Nutria.
1977. Portadas para los fascículos “Historia del Franquismo”.
1978. Colaboración en el documental “A la vuelta del grito”, portadas de discos y las historietas de “El Pato Verde”.
1980. Cartelería de la obra de teatro “Un tal Macbeth”, colaboraciones en meediometrajes y documentales, diversos carteles de teatro y programas de mano.
1982. Crean “Paisa”, para Rambla, donde también publican las historietas de Peter Parovic.
1983. Comienzan a publicar “Sombras” en Cimoc.
1984. “Luis Candelas”, para la revista Madriz.
2002. Corto “Trío Mortal”.
2005. Su última historieta hasta la fecha en el libro 11-M. Once miradas.
Adaptación del libro de Martínez Reverte La Batalla del Ebro en 2 documentales para TVE.
2007. Documental “Corazones de Hielo” para la Fundación de Victimas del Terrorismo.
2008. “Luchadores”, documental sobre la historia de Comisiones Obreras.
Los datos de esta entrada han sido obtenidos en su mayor parte del texto escrito por Felipe Hernández Cava en el catálogo de la exposicion "Tal como éramos", realizada en Sevilla en 2008 sobre la obra de El Cubri.